Cómo Superar una Relacion Tóxica

A lo largo de los años, he observado cómo muchas de nosotras, ha vivido alguna situación que le impide avanzar en el terreno amoroso, repitiendo una y otra vez, un patrón de relaciones tóxicas.

Lo más paradójico de esa situación, es que, el saberlo no nos ha ayudado mucho; ya que aunque nos damos cuenta de que esas relaciones tóxicas no nos aportan, muchas veces, no encontramos la fuerza para decir basta, y alejarnos de estas personas a quienes permitimos hacernos daño.

Por otro lado, es común que este tipo de relaciones se vuelvan muy profundas, ya que muchas veces marcan momentos importantes de nuestras vidas, generando que nos entreguemos a sostenerlas por años, sin encontrar o querer ver la salida.

Señales de una relación tóxica

Pero analicemos las características de una relación tóxica. Quién no ha tenido alguna vez una relación de esas que, nos parten el corazón y nos llevan al borde de los nervios, sacando lo peor de nosotras?!.

Esta clase de relaciones tóxicas, generan una adicción que nos enferma y nos corroe desde dentro hacia fuera.

Cuando empezamos una nueva relación, nos sentimos optimistas, felices y con muchas ilusiones. Nada nos hace presagiar que este bello inicio, con el tiempo se convertirá en una pesadilla.

Todo comienza con pequeños detalles que vamos dejando pasar, ya que en nuestra escala de valores, la agresión se manifiesta después de ciertos parámetros. Por lo que cuando nos damos cuenta, ya estamos completamente sumergidas en un espiral de abusos, navegando en una relación en donde he perdido mi poder.

Entonces nos empezamos a preguntar; ¿qué es lo que tiene este hombre, que no me permite dejarlo?. Soy adicta a su compañía, paso desde la felicidad a la paranoia e infelicidad, en una fracción de horas.  Me convierto en un ser dependiente y desesperado,  imaginando que sin este amor, se me va la vida.. Me dejo de mirar y de amar, dejándome llevar por circunstancias y emociones, que solo enferman mi cuerpo, mi mente y mi corazón.

Por último, y aunque somos conscientes de la situación, no tenemos las suficientes fuerzas para decir basta, ya no mas!. Es ahí en donde nos adentramos en un circulo vicioso. En una montaña rusa de emociones, que condiciona nuestra felicidad a una respuesta, a un mensaje de texto, o algún gesto que nos indique que la relación va a mejorar.

El circulo vicioso de las relaciones tóxicas

¿Que me lleva a estar unida a una persona que no me aprecia?. ¿Por qué quiero unirme sentimentalmente a una pareja que me genera algún tipo maltrato?. ¿Cómo puedo amar a quien siento no me respeta?.

Son preguntas que, en el caso de haber vivido o estar viviendo una de esas relaciones, te hiciste muchas veces  sin respuestas fáciles de responder. Eso que te mantiene en dicho escenario, es una fuerza muy poderosa, que no debemos que tomar a la ligera, ni menos juzgar.

Cuando se está en situaciones como esta, las personas que están a alrededor nuestro nos tratan de abrir los ojos, dándonos ánimo durante un tiempo; para luego dejarnos en paz, culpándonos de nuestra responsabilidad, por no hacer las cosas diferentes.

Es una situación muy compleja,  debido a que existe una causa raíz, que nos mantiene atadas a este tipo de relaciones. Lo que en realidad pasa, es que existe una fuerza sistémica, mas fuerte que nosotras, y que nos impide liberarnos.

En mi consulta he visto muchos casos de este tipo. Mujeres inteligentes, bellas y poderosas, reconociendo que no pueden dejar ese tipo de relaciones, con argumentos tales como: “es mas fuerte que yo”, “soy una estúpida”, “no se que pasa conmigo”. Afirmaciones que me remecen el alma, ya que se entiende que nadie en su sano juicio quiere pasarlo mal.

No obstante, una vez que entendemos la causa raíz de nuestras elecciones de pareja, podemos trabajarlas y trascenderlas, cambiando nuestra realidad y la calidad de nuestras relaciones futuras.

Cómo trascender una relación tóxica?

Lo primero, es hacer una mirada hacia una misma, del momento que estoy viviendo y de qué me gustaría cambiar. El cambio que queramos crear, comienza desde el presente. No sacamos nada con mantenernos ancladas en el pasado, mirando hacia atrás. Eso solo nos generará más culpa, y nos dejará estancadas en el mismo patrón.

También es fundamental ser honestas con nosotras mismas y preguntarnos: ¿de verdad quiero hacer algo distinto?.

Cuando esa respuesta llega fuerte y clara desde el corazón, entiendes que ya estás preparada para comenzar tu proceso de sanación. Ese proceso te llevará a entender y ver, desde qué lugar elijes estar con personas que te hacen daño.

La respuesta está en ti, no en tu pareja. Cuando logras entender esto, te permites responsabilizarte de tus elecciones sin culpa, con amor. Puedes comenzar a juntar las partes de ti misma que están fragmentadas, haciéndote cariño, armando tu historia, mirándola con respeto, ya que es única. Te abres ante la posibilidad de ver mas allá de ti, revisando qué hay oculto detrás del rol de mujer maltratada o mujer postergada.

Entender, a qué perfil de hombres quieres agradar, a cambio de transgredir lo que te importa o lo que realmente quieres. Ser consciente de quién necesita tener esa relación tóxica; la niña interna o la adulta?. ¿Quién no te vio cuando eras pequeña?…quizás tuviste un padre que no estuvo presente. Quizás estás repitiendo un patrón relacional de tus padres o de tus abuelos. Cada caso es una historia única, no obstante, hay muchos patrones que se repiten y que son totalmente corregibles.

Cuando entiendes tu valía, no te permites sostener relaciones tóxicas

Cuando tenemos la fortaleza de ver lo grandiosas y valiosas que somos, se abre un mundo delante de nosotras. Lleno de posibilidades.

El estar bien, feliz y realizada, es una opción de vida, es un derecho que se toma, y que luego se transforma en un realidad por el simple hecho de decretarlo.

Cuando entiendes qué lugar te corresponde en esta vida, TU VIDA,  ya no hay vuelta atrás. Tus relaciones cambian, ya que miras y enfrentas la vida con otros ojos, los que te permiten honrarte a ti misma,  amarte incondicionalmente y ponerte en primer lugar SIEMPRE.

Por eso es tan importante, nunca olvidar desde donde venimos y cuál es nuestra historia; ya que esta nos nutre y nos hace ser las mujeres que somos.  

Si sientes que estás en una situación de conflicto, viviendo una relación tóxica que no te hace sentir plena, permíteme caminar junto a ti, e identificar cuáles son las causas que te mantienen en esa situación. Este es tu momento de brillar y solo tu tienes el poder de cambiar ese escenario: de víctima a protagonista de su propia historia.